En todo proceso de decoración, ya sea un proyecto desde cero o una reforma, se necesita elegir los muebles que se van a utilizar de acuerdo a las necesidades del comitente. Los muebles son el alma de la habitación, nos ayudan a crear el estilo, organizar el espacio, nos permiten una vida confortable, forman parte en nuestras actividades cotidianas e intervienen en nuestra relación con otras personas. Tips para elegir bien.
Elegir los muebles puede resultar complicado. En el marco de nuestra actividad profesional sabemos que la mayor dificultad que tienen las personas es con esta elección. Un mueble inadecuado puede perjudicar una buena decoración, mientras que uno bien elegido realza la misma y define el estilo.
Cuando se trata de una reforma surge la cuestión de qué muebles vamos a utilizar de los ya existentes y cuales otros habrá que sustituir o renovar. Llegado el momento, evalúa cuáles conservarás, cuáles eliminarás y qué muebles necesitas comprar. Ten en cuenta que se pueden reciclar, retapizar o actualizar con un poco de inversión, sin necesidad de comprar nuevos. No tomes la decisión hasta reflexionar si renovándolo podría adaptarse al nuevo diseño.
Aquí tenemos un bonito tocador antiguo al cual se ha aplicado una pátina moderna y colorida y se le cambiaron los tiradores, adaptando la función al nuevo estilo del espacio.
Elegir los muebles requiere tener en cuenta una serie de factores tanto prácticos como estéticos. A continuación analizaremos los diferentes factores que influyen en la decisión de elegir los muebles. Estos datos servirán tanto para la elección de muebles nuevos como referencia para decidir cuáles se pueden conservar.
**El mueble y su función
El primer factor para decidir si un mueble se queda o se va es su función; debemos preguntarnos: “¿qué muebles necesito?”. Las diferentes actividades que se realizan en una habitación en particular, por ejemplo un dormitorio, requieren muebles específicos. Incluso cada familia tiene necesidades diferentes por tener distintas actividades y diferentes edades. Para definir qué muebles necesitamos según su función hay que prestar especial atención a los siguientes aspectos.
1-Los muebles básicos para cada ambiente
Cada ambiente o espacio de la casa tiene sus muebles y usos específicos. Estos espacios se organizan de acuerdo a sus actividades: el comedor para comer, el living es el área de descanso o lugar de encuentro, el dormitorio para dormir, y así sucesivamente. Si estás empezando a confeccionar tu listado de muebles, por ahora empieza decidiendo qué muebles necesitas según la habitación, por ejemplo: en un dormitorio además de la cama, puedes optar por mesas de luz o no, colocando en su lugar lámparas de pared, si pondrás un mueble de tv, si apartarás un sector de lectura, etc. Por supuesto todo estará supeditado también a la superficie con la que cuentas.
Ejemplos
En este dormitorio de pequeñas dimensiones se optó por dejar las mesas de luz libres y colocar dos lámpras colgantes sobre las mismas, creando el punto focal en la pared cabecera. (Ya hablaré en otra entrada cómo lograr ésto)
2-Definir necesidades personales
Un ambiente, por ejemplo un dormitorio, tendrá diferentes necesidades de acuerdo a quién lo utilice. Una persona sola necesitará una cama de una plaza y una mesa de luz. Un cuarto infantil para dos hermanos demandará dos camas de una plaza o una cama doble cucheta, etc.
Además cada caso puede incluir necesidades más específicas. Un cuarto para una sola persona también podría estar formado por una cama de dos plazas si lo que se busca es comodidad, o si algunas noches se comparte el cuarto con la pareja. El cuarto infantil para los hermanos podría requerir de dos mesas de luz si se necesita mayor superficie de apoyo.
De este modo se puede personalizar el listado de muebles que se necesitan para nuestro proyecto. Es importante detenernos a pensar cuáles son realmente las necesidades del cliente y cómo resolveremos el tema de los muebles para hacerle la vida más cómoda.
3-Los muebles complementarios.
Para poder llevar a cabo estas actividades también se necesitan algunos muebles complementarios, por ejemplo muebles de guardado, imprescindibles para mantener el orden y tener espacio de guardado de ropa y otros objetos.
Una habitación podría necesitar una amplia biblioteca si tenemos una buena colección de libros, o quizá un escritorio, una mesa para la computadora o un mueble de TV, además de los placards. En un comedor se puede optar por colocar un vajillero para los utensilios que no se guardan en la cocina, como vajilla y cubiertos finos, copas, etc.
Aquí tenemos un ejemplo de vajillero
Y un mueble multifunción
**Tamaño, dimensiones y forma
El segundo factor que tendremos en cuenta, una vez definido qué muebles vamos a necesitar, será el tamaño y la forma que éstos tendrán. Tanto sus dimensiones como su forma pueden estar dadas según su practicidad, su estética, estilo o espacio disponible.
Las cuestiones prácticas se relacionan directamente con su función, aunque aquí se deberán definir especificaciones de cada uno, por ejemplo, cuántos cajones tendrá una cajonera, de cuántos módulos debe ser la biblioteca o cuántos comensales tendrá la mesa.
Las cuestiones plásticas (estética) se relacionan con el diseño integrado al espacio, por ejemplo, si los muebles serán de líneas rectas o curvas, si el espacio requiere de muebles altos o bajos, etc. La fluidez y el ritmo de las masas en el espacio son consideraciones plásticas de forma y dimensión, dicha relación será tanto entre los objetos entre sí como con el espacio.
Finalmente como lo mencionamos anteriormente, el espacio condiciona el tamaño de los muebles y también la distribución de los mismos. Siempre hay que relacionarlos con el espacio antes de comprarlos, si su tamaño es adecuado al diseño en general (ni demasiado grandes ni demasiado pequeños). Observa también el espacio físico real de la habitación, el lugar que quedará alrededor del mueble (espacio vacío y áreas de circulación) y su relación con los elementos estructurales (altura de la ventana o tamaño de una puerta)
En un espacio amplio podemos darnos el lujo de tener muebles grandes, como éste
Muebles bajos para priorizar las amplias y hermosas vistas
**El mueble y el estilo
El siguiente punto de referencia en la elección de muebles tiene que ver con lo que más nos gusta: lo estético, su estilo, el color, si serán modernos o clásicos, y así. Estas se harán teniendo en cuenta el estilo general del proyecto, debiendo estar integrados al estilo general de la habitación convirtiéndose en un aporte significativo para crear el mismo y para lograr el impacto visual que buscamos para el proyecto final.
Estilo barroco
Minimalista
Rústico campestre romántico
**Los materiales
Finalmente habrá que definir de qué materiales estarán realizados los muebles ya que ésto será fundamental para su vida útil y su correcta integración al estilo decorativo.
El material se adapta al uso
Debe estar elaborado de un material que se adapte al uso y actividades para las cuales se utilizará. Hay algunos más duros, como maderas o tapizados y otros más delicados. Una mesa laqueada es un lujo no apto para un comedor diario en una familia con niños. En este caso la madera dura o un laminado son las mejores opciones. Con las telas ocurre algo similar: un cuero ecológico es apto para un sillón con mucho uso y que permita el lavado, mientras el chenille es siempre más delicado y sufre más el desgaste y las manchas.
El material se integra al estilo decorativo
La calidez de la madera, la modernidad de un laqueado o la frialdad del mármos deben estar integrados al concepto del estilo general del proyecto. Los materiales y sus texturas nos hablan por sí mismos; la integración y combinación de los materiales (incluyendo pisos, telas, cortinas, etc) serán tenidos en cuenta en la planificación del proyecto.
Ejemplos
Sillones de cuero de fácil mantenimiento
Rústicos, de uso intensivo
Butaca Becara de terciopelo morado
Consideraciones finales
Generalmente se supone que elegir los muebles es algo sencillo, pero por lo que vimos, no lo es tanto. Puede gustarnos pero no adaptarse al espacio o funciones, y quizá nos olvidemos de ver la practicidad del mismo y nos dejamos llevar por su diseño. Por eso hay que tomarse el tiempo de pensar qué muebles necesitamos, sus dimensiones, estilo y material antes de hacer cualquier inversión.
Trata de ser objetivo, observa el lugar, toma medidas, evalúa lo que ya tienes para saber cuáles quitarás y cuáles dejarás y luego compra teniendo presente los puntos de este informe, y por supuesto contando con un presupuesto realista adaptado a tus posibilidades económicas. Esperamos te haya sido de utilidad.
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